El Modelo GOTA propone que la gobernanza y la participación ciudadana son relaciones políticas entre actores diversos de los territorios, que se reconocen como portadores de intereses y concepciones plurales sobre la democracia y sus prácticas de participación ciudadana, que en un momento dado establecen equivalencias que les permite llegar a acuerdos y concertaciones en términos de un fin común y una forma de lograrlo, lo cual, impulsa a los actores a actuar colectiva y sinérgicamente mediante una estrecha relación política.
Este instrumento de Modelo GOTA que estamos presentando, se concibe como fase preliminar de un proceso estratégico de gobernanza, cuya validez estará condicionada a los ejercicios de discusión futuros y el ajuste que se realice con todos los actores participantes. Esto quiere decir que el Modelo GOTA debe ser concebido como proceso en construcción permanente.